Una caña de pesca de 53g: una hazaña en el rodbuilding

Una caña de pesca de 53g: una hazaña en el rodbuilding

Se dice a menudo que el único límite de un rodbuilder es su imaginación. En este contexto, nacen (o fracasan) desafíos y cañas de pesca extraordinarias. A veces se trata de un logro estético, otras veces de la explotación de un material innovador, pero en muchas ocasiones es sobre todo un desafío técnico. Con este espíritu y con objetivos bien definidos, Stéphane Montailler logró la hazaña de ensamblar una caña que pesa menos de 50g.

¿Cómo empezaste en el rodbuilding y cuál es tu visión sobre esta actividad?

Stéphane M.: Me metí en el rodbuilding porque quería crear una herramienta específica para la pesca de luciopercas. Todo comenzó con una 62MX. Fui a la feria de pesca en Nantes buscando una caña con una acción muy particular, y me encontré con el stand de “Rodhouse”...

Hablé con Fred y le dije: “¡Muéstrame cómo se monta una caña!” Y así comenzó mi aventura en el rodbuilding.

Desde el principio, vi todo el potencial técnico que podía extraer del rodbuilding. Cada caña que construyo está destinada a un uso específico y la diseño según mis necesidades, conocimientos y los mejores componentes disponibles en ese momento. ¡Todavía conservo la 62MX que monté hace 14 años!

Soy un rodbuilder que se enfoca en el rendimiento, no en la decoración, aunque sé cómo hacerlo.

¡Cuéntanos sobre esta caña de 53g que has montado!

Stéphane M.: La base es un Rainshadow IMMWS 62L, una caña ligera de 6.2 pies diseñada para la pesca de percas. Ya había montado esta caña antes de empezar a pescar en barco, principalmente para usar crankbaits pequeños y spintails.

En realidad, he montado esta 62L tres veces. La primera versión era muy simple, ya que fue mi segunda caña montada. Hoy, después de varias optimizaciones, he conseguido un peso increíble de solo 53g.

¿Qué te motivó a llevar a cabo este proyecto?

Stéphane M.: El blank ya era muy ligero, pero quería llevarlo al extremo para conseguir la máxima sensación al pescar.

La primera versión pesaba 70g con los grips estándar. Funcionaba muy bien, pero sabía que se podía mejorar aún más.

El principal cambio fue pasar de un juego de anillas Alconite a un juego Torzite para aumentar la velocidad y la sensibilidad al pescar con pequeños softbaits.

¿Cuáles fueron los pasos para reducir el peso?

Stéphane M.: ¡No se llega a 53g por casualidad!

Lo primero que hice fue optimizar cada detalle. Lijé el blank con el dorso de una cuchilla de cúter y luego lo terminé con papel de lija de grano 1000 y agua.

Elegí el portacarrete más ligero del mercado: el Fuji DPS en tamaño 16. Una de las claves fue pegar solo 1.5 cm de shim en cada extremo del portacarrete para crear una cavidad que mejora la resonancia.

También tuve mucho cuidado al aplicar el pegamento para evitar excesos innecesarios que añadieran peso.

¿Cuáles fueron las dificultades?

Stéphane M.: En realidad, no hubo grandes dificultades, solo precisión. Lijar requiere paciencia, pero el resto es pura planificación y atención al detalle.

¿Cómo se comporta la caña en acción de pesca?

Stéphane M.: ¡Es una caña impresionante! 53g en la mano es increíble.

El blank tiene una resonancia espectacular, con una acción regular fast que permite pescar tanto con crankbaits pequeños como con softbaits.

A pesar de su ligereza, he capturado percas de más de 40 cm, la más grande midió 47 cm, ¡e incluso un lucioperca de 70 cm!

¿Has construido otras cañas similares?

Stéphane M.: No en cuanto a reducción de peso, pero siempre busco el máximo rendimiento.

Estoy mejorando algunos de mis proyectos anteriores para conseguir un mejor equilibrio en mano.